lunes, 9 de septiembre de 2013



A finales del siglo XIX y principios del XX, las grandes potencias mundiales eran Francia, Gran Bretaña, Alemania, Estados Unidos y Japón. Todas estas grandes naciones querían evolucionar antes que las demás, con motivo de la revolución industrial. Además, querían extender su territorio colonizando países del tercer mundo, ya que en estos países habían grandes excedentes de materia prima, con la que podrían trabajar y enriquecerse enormemente, ya que pagaban miserias a los trabajadores nativos, y en cambio ellos vendían en el mercado a un alto precio.
Poco a poco, los países se dieron cuenta de que juntos lograrían antes sus propósitos, así que formaron alianzas, por un lado estaba la Triple Alianza, creada por Otto von Bismark en 1882  con el propósito de aislar a Francia del poder europeo, esta alianza estaba formada por Alemania, el Imperio Austro-húngaro, el Imperio Otomano e Italia, que más tarde se cambio de bando. Por otro lado se encontraba la Triple Entente, creada en 1907 y formada por Gran Bretaña, Francia, Bélgica, Irlanda, Serbia y Rusia, aunque más tarde se le unieron Italia, Japón y Estados Unidos.
La guerra comenzó en 28 de junio de 1914, cuando muere asesinado el heredero del Imperio Austro-húngaro, el Archiduque Francisco Fernando. El asesinato lo cometió un grupo nacionalista serbio, Mano Negra. Así que el Imperio Austro-húngaro, como represalia declaró la guerra a Serbia. Rusia se alió con Serbia, y a su vez Alemania ayudó al Imperio Austro-húngaro, declarando la guerra a Rusia y Francia. En ese momento comenzó lo que sería la Primera Guerra Mundial.
La Primera Guerra Mundial se dividió en tres periodos. El primero de ellos se llamó las Guerra de Movimientos, ya que utilizaban múltiple estrategias de las tropas de ambos mandos con rápidos movimientos para atacar a las tropa enemigas sin tener represalias. Uno de los primeros movimientos fue efectuado por Alemania, con el propósito de invadir Francia. Una vez invadida Francia se libró la batalla del Marne, que como resultado, hizo que Alemania replegara sus tropa de Francia.
Con la cada vez mayor fabricación de armas de fuego, los ejercitos tuvieron que cambiar las guerra al descubierto, por las trincheras, así fue como comenzó en 1915, el segundo periodo de la Guerra Mundial, la guerra de Trincheras. Las trincheras eran grandes fosos alargados, de 1 o 2 metros de profundidad, estaban unidas unas a otras, de esta manera, los soldados podían comunicarse y a la vez protegerse de los ataques enemigos. Una de las batallas más recordadas fue la de Somme, en la que se enfrentó el ejercito inglés contra el alemán.
En 1917, comienza la tercera y última fase de la guerra, la nueva batalla de movimientos o crisis de 1917. Los británicos y los franceses usan por primera vez el tanque como arma militar, y los alemanes atacan con una guerra submarina. Pero Alemania no se contentaba con derrotar a Francia y Gran Bretaña, también decidió enfrentarse a una de las mayores potencias mundiales, Estados Unidos, que entró en la guerra el 6 de abril de 1917, de parte de la Triple Entente, el ejercito norteamericano disponía de un gran número de soldados, que suplía las bajas del ejercito ruso, que se había retirado tras la crisis socialista rusa.
En 1918, se disputó la segunda batalla de Marne, que enfrentaba a Estados Unidos y Francia, contra Alemania. Como consecuencia los alemanes tuvieron que replegar muchas de sus tropas. Meses más tarde las naciones del Imperio austro-húngaro se fueron rindiendo y Austria firmó la paz con la Triple Entente. Alemania se encontraba sin aliados y su káiser, Guillermo II había huido a Holanda, por lo que el 11 de noviembre de 1918 el nuevo gobierno alemán firmó el alto el fuego, e hizo que acabara la Primera Guerra Mundial.
Cinco años después del asesinato del archiduque Francisco Fernando, el 28 de junio de 1919, se firmó el tratado de Versalles, en el Salón de los espejos del palacio de Versalles. En este tratado se firma la paz definitiva entre Alemania y los países aliados, y se declara a Alemania como única culpable de la Primera Guerra Mundial, por lo que debe conceder a los países aliados parte de su territorio, pasando de 540.766 km2 a  468.787 km2 de extensión territorial y entregando una indemnización de 3.000.000.000 de dólares. Alemania firmó el tratado sin ningún tipo de oposición y entrego la suma  de dinero requerida.

martes, 3 de septiembre de 2013



La lucha por Gibraltar, entre España e Inglaterra, se remonta al año 1702. En aquel tiempo la casa real española, los reyes Austrias, se habían quedado sin herederos al trono, por lo que la corona francesa, los Borbones, tuvieron que encargarse de la casa real española. Pero Inglaterra y Holanda no eran partidarios de que Felipe V de Borbón llegará al trono español, ya que si lo hacía, Francia sería más poderosa. Así que en 1702 las flotas inglesas y holandesas desembarcaron en Cádiz, en plena Guerra de Sucesión.
El 1 de Agosto de 1704, el almirante inglés Rooke, bajo las órdenes del Príncipe Jorge, decidió que debía llegar a su país con alguna conquista, ya que no habían podido impedir el reinado de los Borbones en España, así que cogió a las escuadras anglo-holandesas y se dirigieron a tomar Gibraltar, ya que era un gran punto geográfico y militar, para poder controlar las entradas y salidas del mar Mediterráneo. Y así también pondría a los españoles del sur en contra del rey Felipe V. Primero intentaron conquistar Gibraltar con un tratado sin guerra, pidiendo al Gobernador de Gibraltar que se rindiera y jurara fidelidad al archiduque Carlos, pero el gobernador no se rindió tan fácilmente. Así que las flotas anglo-holandesas decidieron atacar durante las noches del 3 y el 4 de agosto, bombardeando el castillo y la misma ciudad. A causa de las escasas tropas militares de Gibraltar contra los 10.000 hombres del ejercito inglés, Gibraltar fue tomada y el gobernador Diego De Salinas se rindió, entregando las llaves de la ciudad al almirante Rooke, en nombre del archiduque Carlos. Los ingleses habían prometido a los gibraltareños libertad y derechos, al igual que los tenían antes de la conquista siempre que juraran lealtad al archiduque Carlos, pero las tropas anglo-holandesas no cumplieron su palabra, saqueando, violando y profanando todas las iglesias católicas de la ciudad. Así que los nativos de l peñón se revelaron, matando a todos los militares que podían. Finalmente el gobierno inglés restauró el orden, pero casi 4.000 habitantes gibraltareños decidieron marcharse de la ciudad, extendiéndose por Algeciras y San Roque.
El 24 de Agosto de 1704 una flota franco-española intento reconquistar Gibraltar, en la batalla de Vélez-Málaga, pero no consiguieron vencer, durante ese mismo año volvieron a intentarlo en varias ocasiones, pero el resultado siempre era el mismo.
Los ingleses, decidieron apropiarse completamente de Gibraltar, ya que en realidad pertenecía al archiduque de Barcelona, al que llamaban Carlos III. Así que 1706 la reina Ana nombra gobernador al militar inglés Roger Elliott. Y en 1711, el gobierno de Gran Bretaña ordenó que fueran expulsadas todas las tropas extranjeras, así que en Gibraltar solo tenían poder los Ingleses.
En 1713 finalizó la guerra de Sucesión Española, y se firmó el tratado de Utrecht, en el que se selló la paz entre ambos gobiernos. Y se aceptó a Felipe V como rey de España, pero eso si, Gibraltar sería propiedad del gobierno inglés para siempre.
Durante los primeros años de mandato inglés en Gibraltar no hubieron muchos cambios, los ingleses tan solo querían el peñón como estrategia de negociación con los demás países europeos. Pero poco a poco se fueron dando cuenta de que podían llegar a tener más ingresos si utilizaban el peñón como punto estratégico. En las batallas napoleónicas, Gibraltar fue una de las bases navales más importantes, ya que allí se disputó la batalla de Trafalgar.
En 1869 se abrió el canal de Suez y Gibraltar y a su vez Gran Bretaña cobraron más importancia como ejercito y nación.
En 1909 el gobierno inglés mandó construir la “verja de Gibraltar” , de esta forma se podía apropiar de más de la mitad de un terreno que no pertenecían al gobierno inglés.
Durante la Segunda Guerra Mundial, Gibraltar volvió a servir de fortaleza para las tropas aliadas de Gran Bretaña.En 1941, los nazis intentaron hacerse con el poder de Gibraltar, pero para ello Franco debía dejarles pasar por España, y este por temor a que también invadieran el país, no lo permitió.
En 1954, con motivo del 250 aniversario de  la toma de Gibraltar, la reina Isabel II decidió visitar la ciudad, cosa que enfureció al dictador español Francisco Franco, que reivindicó la soberanía del peñón. Franco decidió cerrar el consulado español de Gibraltar y aumentar las restricciones en el paso libre de personas y vehículos entre Gibraltar y España. Conforme pasaba el tiempo y Gibraltar no era propiedad española, Franco aumentaba más las restricciones, llegando a impedir el paso de vehículos en la frontera.
En 1955, en la asamblea de las Naciones Unidas, España volvió a reivindicar la soberanía de Gibraltar a España. Pero la ONU tan solo aconsejo negociar un nuevo tratado, cosa que no se hizo. Pero en 1967 se hizo la primera consulta sobre la soberanía de Gibraltar, y el 99% de la población votó por seguir siendo británicos.
Actualmente el gobierno español sigue reclamando la soberanía de Gibraltar.

martes, 27 de agosto de 2013

Don Juan Tenorio - Grandes obras de la literatura universal


Un año después de la apuesta entre don Juan Tenorio y don Luis Mejía, ambos se presentan en la taberna de Buttarelli, allí, cada uno le contará al otro, cuantas han sido sus maldades, engaños y lujurias. Pero la conversación no es privada, en la misma taberna se encuentras don Diego, padre de Don Juan, y Don Gonzalo, padre de Doña Inés, con quien Don Juan está prometido desde hace tiempo. Finalmente la apuesta la gana don Juan, pero don Luis muy satisfecho, le replica que él pronto se va a casar. Don Juan sin pensarlo dos veces, decide apostarse su propia vida, a que antes de la boda, hará impura a doña Ana, prometida de Don Luis.
Al escuchar tal barbaridad, don Diego y Don Gonzalo, le recriminan a don Juan que es un hombre miserable y ruin. Y don Gonzalo descompromete a doña Inés. A lo que Don Juan responde, amenazando con secuestrar a doña Inés del convento en el que se encuentra.
Tras firmar la apuesta, ambos son detenidos, a causa de la denuncia que ha puesto el otro. Poco después ambos son puestos en libertad.
Nada más salir, don Luis, es precavido, y advierte a Pascual, criado de doña Ana, de las intenciones que tiene Tenorio.
A su vez, Don Juan, comienza a preparar su
hazaña, va a hablar con otra de las criadas de doña Ana, para que le consiga una llave del aposento de esta, a cambio de unas cuantas monedas de oro, mientras, Ciutti distrae a Don Luis. Entretanto, en el convento, Brígida, criada de Doña Inés, enamora a esta de Don Juan.
Esa misma noche, Don Juan se infiltra en el convento, allí se presenta ante Doña Inés, que al ver a su amado se desmaya. Entre Brígida, Ciutti y Don Juan, llevan a Doña Inés a la casa de Tenorio. Nada más aposentar a la secuestrada, Don Juan parte a casa de Doña Ana, que haciéndose pasar por Don Luis, la hace impura.
Después, vuelve a su casa, donde despierta Doña Inés y puede declararle su amor verdadero, pero son interrumpidos por Don Luis, que pretende matar a Don Juan, al momento llega Don Gonzalo, reclamando a su hija. Don Juan le confiesa el amor verdadero que siente hacia su hija, pero Don Gonzalo no le cree, y decide arreglar el problema en un duelo. Finalmente Don Juan Mata a Don Luis y a Don Gonzalo, poco después del asesinato, llegan los alguaciles, y Don Juan huye a Italia junto con Ciutti.
Después de cinco años, Don Juan regresa a Sevilla. Al llegar a su antigua casa, descubre un panteón, en el que está enterrada Doña Inés. Allí se encuentra con un escultor, que le relata la trágica muerte de la joven, que murió a causa del desamor, al ver que su amado la había abandonado. Al marcharse el escultor del panteón, de la lápida de Doña Inés, aparece una sombra, que le comunica a Don Juan, que si con ella desea estar para toda la eternidad, debe arrepentirse de sus pecados.
Pero don Juan cree que tan solo ha sido un sueño. Esa noche invita a cenar a su casa a sus amigos, el capitán Centellas, Don Rafael y al difunto Don Gonzalo para demostrarse a si mismo que no existen los fantasmas. Y así lo hace, don Gonzalo se presenta a la cena, hace que se desmayen los invitados y advierte a don Juan que es su última oportunidad para arrepentirse. Al despertar Centella y Rafael se enfrentan a don Juan, que acaba muerto. Una vez muerto se le vuelve a aparecer Don Gonzalo, que pretende llevarle con él al infierno. Pero en ese momento doña Inés, le coge de la mano y hace que sus pecados sean perdonados, para que así los dos puedan estar juntos durante toda la eternidad.

jueves, 22 de agosto de 2013

Historia de KFC (Kentucky Fried Chicken)


La historia de una de las franquicias de comida rápida más importantes del mundo KFC (Kentucky Fried Chicken)



Harland David Sanders, nació el 9 de septiembre de 1890, en Henrryville, Indiana. Se crió en una familia de granjeros, con una vida muy humilde, pero cuando Sanders tenía 5 años, su padre murió por lo que Sanders tuvo que aprender a cocinar. A los 12 años dejó la escuela, para poder trabajar y ayudar en la economía familiar.
En 1929, Sanders, abrió una gasolinera en Kentucky, donde también preparaba pollo frito casero, para venderlo en el mismo establecimiento. Poco a poco, su pollo frito se fue haciendo más popular, así que decidió abrir un motel al lado de su gasolinera. 
En 1936, el gobernador de Kentucky le otorgó el título de coronel. Poco después llegó la guerra, y el coronel tuvo que vender su gasolinera, pero en 1940, patentó su receta de pollo frito, llamándola Receta Original. 
En los años 50, el Coronel Sanders, se dedicó a promocionar su franquicia de pollo frito, a la que llamó Kentucky Fried Chicken. El coronel se presentaba en los restaurantes, con un buen bigote, la perilla y un traje blanco, acorde con su barba. Y en 1952 se abrió el primer KFC, en Salt Lake City, en una pequeña hamburguesería, propiedad de Pete Harman.
En 1956, trasladó la sede de KFC a Lousville, y en 1962, el Coronel Sanders ya tenía más de 600 restaurantes en todo el país, con ingresos anueales que sobrepasaban los 300.000 dólares. Pero el coronel, no podía con todo y tuvo que vender la franquicia a un grupo inversor por 2 millones de dólares, más un sueldo de 40.000 dólares anuales. Los nuevos dueños, extendieron la franquicia a nivel internacional, en países como Japón, México o Jamaica. También, caracterizaron la marca con los colores rojo y blanco, la imagen del coronel y la siglas KFC.
En 1970, Sanders y sus hijos se desvincularon del consejo de dirección. La empresa tuvo una gran crisis, que les obligó a cerrar algunos de sus restaurantes. pero en 1971, Heublein, una empresa de bebidas alcohólicas,  compró el grupo por 700 millones de dólares, e hizo que KFC saliera adelante.
El 16 de diciembre de 1980, falleció el coronel Sanders, y en su honor, la compañía mantuvo su rostro como emblema de KFC. En 1982, Heubleinfue absorbido por la tabaquera R.J.Reynolds, que a su vez también se quedó con KFC. La tabaquera extendió KFC por europa. En 1983, la franquicia ya contaba con 4.500 restaurantes en Estados Unidos y 1.500 en 54 países del mundo.
En 1986, R.J. Reynolds, vendió KFC a Pepsi Co, por 840 millones de dólares. Pepsi ya tenía otras dos franquicias, Pizza Hutt y Taco Bell. En 1996, Pepsi Co creó una filial, que se encargaba de las cadenas de restauración, llamada Yum! Brandss. Actualmente KFC sigue siendo propiedad de Pepsi.

Biografía de Leonardo da Vinci

La historia de uno de los mayores genios del renacimiento, Leonardo da Vinci

Leonardo Da  Vinci nació el 15 de abril de 1452 en Vinci, Florencia, Italia. Provenía de una familia noble italiana, su padre, quien no le aceptó como hijo legítimo, Pierro da Vinci, fue embajador de la República de Florencia, en cambio, su madre, provenía de una familia de campesinos de la Toscana.

Aunque no fuese aceptado como hijo legítimo, Leonardo vivió en la casa de su padre durante toda su infancia, allí aprendió a leer, a escribir y las bases de la aritmética. Desde muy pequeño se interesó por el arte, pero no fue hasta los catorce años, cuando su padre le autorizó para entrar en el taller de Andrea del Verrochio, allí aprendió pintura, escultura y técnicas y mecánicas de la creación artística. 

Poco a poco el aprendiz fue superando al maestro. Leonardo, ayudaba a Verrocchio en algunas de sus obras, y en todas, las obras de Leonardo siempre resaltaban más.Más tarde en el taller de Antonio Pollaivollo, se inició en los estudios de la anatomía, y en el conocimiento del latín y el griego. 

A sus treinta años, Leonardo decidió abandonar Florencia y trasladarse a Milán, donde, fue ingeniero durante 17 años, de Ludovico Sforza, allí investigó sobre la hidráulica, la mecánica y la arquitectura, sin dejar de lado la pintura y la escultura.
En 1491, Luca Pacioli, matemático y fraile franciscano, amigo de Leonardo, publicó la ilustración de Leonardo de la divina proporción, basada en el canon clásico griego de la belleza.

En 1490, Leonardo, formó su propia escuela de arte en un pequeño taller de Milán. Poco a poco en la escuela se va formando un gran grupo de fieles aprendices. Mientras, Leonardo seguía con sus obras, entre 1495 y 1498, pintó la Última Cena, una pintura al fresco, que se encuentra en el convento de Santa Maria delle Grazie, Milán. Entre 1499 y 1500, también pintó Santa Ana, la Virgen y el niño y san Juanito, cuadro que plasma a las dos hermanas, María y Ana, su madre, abuela de Jesucristo y San Juan Bautista.


En 1499, la ciudad de Milán es tomada por Luis XII de Francia, por lo que Ludovico Sforza es destituido y huye a Alemania. Leonardo, queda a cargo de Luis de Luxemburgo, poco tiempo después regresa Ludovico Sforza, pero esta vez Leonardo no le sirvió, sino que huyó a Venecia con Luca Pacioli.
Allí, en Venecia, contrataron a Leonardo como ingeniero militar. Con este cargo pudo centrarse en la investigación de nuevos proyectos, entre ellos el submarino, el cual propuso al gobierno pero nunca fue utilizado.
Durante 1500 y 1501, pinta la lucha por el estandarte, el retrato de Isabel de Este y la Virgen de los husos.
Más tarde, en 1502, fue nombrado capitán e ingeniero general de la familia Borgia. Y en 1503 se traslada a Florencia de nuevo para ejercer de arquitecto e ingeniero hidráulico. Mientras, pintó Leda y el cisne, pero esta gran obra fue eclipsada por el retrato de Mona Lisa, que desde el momento en el que se mostró al público hasta el día de hoy, ha sido una de las obras más conocidas de la historia. En este cuadro, Leonardo creó la técnica del sfumato, pero la más característico de la obra es la enigmática sonrisa de la Mona Lisa, ya que no se pueden apreciar sus sentimientos.

En 1506, Leonardo regresa a Milán, donde su pasión por la anatomía humana y el vuelo de los pájaros incrementa, y de ello, crea un nuevo proyecto, con el que pensaba que las personas podrían volar, al igual que los pájaros. Sus bocetos, eran muy parecidos a los del helicóptero moderno.

En 1513, se marchó a Roma, donde trabajó la hidráulica, para la familia Medici. Durante este periodo pintó su autorretrato más conocido, Autoritratto.

En 1515, Francisco I, rey de Francia, reconquistó Milán. Era un gran admirador de Leonardo, así que en 1506 le propone trasladarse a Francia. Leonardo, en Francia, se convirtió en el primer pintor, arquitecto y mecánico del rey, aunque fue más un miembro de la nobleza, que un servidor. Mientras tanto, pintó San Juan Bautista.

En 1517, el brazo derecho de Leonardo se paralizó, pero esto no le impedía continuar con sus proyectos. Finalmente, el 2 de mayo de 1519, Leonardo da Vinci murió en Cloux, Francia, a sus 67 años. 
Al no tener ni mujer ni hijos, su legado fue a parar a su discípulo Melzi, al que conocía desde que tenía diez años.